Hoy echan tu peli

Si, en Telecinco, a las 22:30... Y yo más contenta que unas castañuelas en una feria y es que a veces una es feliz con cualquier cosa.
De alguna manera eso significaba que te acordabas de mí, que quizás hasta me echabas de menos, pero hay tantas formas de echar de menos, que hasta se pueden llegar a malinterpretar. Incluso ese momento de acordarte de alguien puede ser tan efímero como las estrellas fugaces en el cielo, eso mismo, un momento fugaz y un posterior mensaje vacío por tu parte, demasiado lleno por la mía.
Pero hoy algo ha cambiado, nadie me avisó de “mi peli”, o quizás si y nunca lo sabré, pero tampoco tengo curiosidad por saberlo. Hoy ya dejo de tener importancia, hoy no necesité ningún recordatorio. Y lo mejor, fui feliz volviendo a ver mi peli, porque lo mejor, lo tenía a mi lado, no vino de ningún mensaje.

Y entonces lo supe

Si, lo supe, con certeza absoluta, piensas en mí y mucho, aunque la realidad se imponga y esto no tenga muchas más consecuencias que esta increíble certeza.

Pero en otra realidad, donde la animación, los superhéroes y el misticismo se entremezclan mostrando un mundo tan irreal como fascinante, y donde yo me atrevo a pedirte una cita y la aceptas con la mejor de tus sonrisas. Donde se nos pasen las horas hablando y debatiendo como si nos conociéramos desde siempre, donde las buenas intenciones sean las que primen en tan interesante encuentro, donde el tiempo vuele alrededor de nosotros y no tengamos demasiada consciencia de él. Y donde nos despidamos con el más tierno de los abrazos, sin pensar si es ético o no, políticamente correcto o no.

Que pena que esa no sea la realidad, pero en la realidad en la que vivimos, ya tengo una certeza, enorme, pero que no deja de ser una mera anécdota: piensas en mí y mucho.

QUERIDO BRANCH

Querido Branch:

Hoy no es un día cualquiera, hoy decidí que necesito contarte las cosas que nunca me atreví a decirte, y es que me notas callada, sin nada que decir. Es lo que tiene estar contigo, tu pesimismo me ha terminado alcanzando y no tengo ya fuerzas para luchar por mi y por ti.

Llevo años perdonándotelo todo, intentando ser comprensiva, pero siempre termino dándome cuenta de que al perdonarte, me condenaba a una frustración que no paraba de crecer en mi. Es curioso, te perdonaba y te excusaba, autoengañandome sólo para quedarme más tranquila, pensando en que todo cambiaría. Sin duda en eso, tuve yo la culpa, la gente rara vez cambia.

Pienso en todas las promesas de todo este tiempo, y sin duda nunca pensaste en hacer realidad ninguna. Supongo que era lo mejor para ti, era tu manera de asegurarme de que estaría a tus pies en todo momento, la cura provisional para tu bajísima autoestima y tu forma de sentir que podías dominar a alguien.

Te dejo con tus quejas continuas, tus penas imaginarias y sentimientos incomprendidos, según tú, que te hacen estar tan mal. Te dejo con tus ganas de hacer sentir pena y compasión a todos los que te rodean cuando pregonas que estás solo, triste y que no sabes hacer con tu vida. Te dejo con tus pocas ganas de buscar soluciones a tus problemas, porque por mucho que quieras, las cosas no vienen del cielo, y quietecito, no vas a conseguir nada. Te dejo con tu incapacidad de sentir empatía por nadie. Te dejo en tu agujero del que poco a poco te estás condenando a no salir. Te dejo con  tu sempiterna cara de amargado, y tu odiosa manera de hablar de las personas que se preocupan por ti. Te dejo con todas las traiciones que has llevado a cabo y espero que no se te vuelvan en contra.

No sé cómo terminaras, y espero no verlo, porque encima, si te veo mal, yo sufriré lo mío, porque en el fondo sabes, que a pesar de todo eso, yo te quiero.

PD: Branch no es una persona en concreto, todos sabemos que hay muchas personas así, que nos importan, pero que siempre nos arrastran a su terreno, que nos hacen daño, que se comportan de forma egoísta, pero que siempre queremos intentar ayudarlas una y otra vez, hasta que ya es imposible. 

Dedicada a todas esas personas que tienen uno o varios Branch en su vida.

CUANDO LA VIDA TE DA SEGUNDAS OPORTUNIDADES

Menudo título para una entrada, y una entrada, que para mi si cabe, es quizás la más importante que he escrito en todo este tiempo.

Si, hace más de un año, la vida me puso enfrente de una situación difícil, casi límite diría yo. Tuve que tomar una decisión drástica, algo que nunca pensé que haría, algo que cuando lo tuve claro y lo compartí con mis allegados, tuve que vivir reacciones de todo tipo, desde los que me apoyaron (que fueron los menos), pasando por los que se asustaron, hasta los que me llamaron loca y me auguraron el fracaso más estrepitoso.

Hoy, (más bien mañana día 4), un año después de todo aquello, no me puedo sentir más afortunada, mi vida ha cambiado tanto, que a veces ni siquiera soy capaz de reconocerme. Si, la vida me dio una segunda oportunidad, me dijo bien claro que no sería fácil, que sería muy duro, que me encontraría incomprensión, hipocresía de mucha gente, pero como buena escorpio que soy, me tiré a la piscina, y gracias al cielo, todo salió mucho mejor que bien. Sin duda he vuelto a nacer de nuevo.

Y de repente, he debido de ser muy buena, porque a la vez de este proceso, he recibido otra segunda oportunidad, una que me ha venido sola, y que aún me cuesta creer que haya pasado. Voy día a día, cada día que pasa lo siento como una prórroga, y doy gracias al cielo porque a lo tonto se lleva prorrogando más de un año. Sólo espero, que por pedir no quede, que se prorrogue hasta el infinito y más allá...

Quiero dar las gracias a todos los que me habéis apoyado, preguntado, sostenido, animado, preocupado... Vamos, los que habéis estado ahí para que no me viniese abajo, para que fuera fuerte, para que luchara, me encantaría poder daros las gracias uno por uno, pero creo que tardaría muchísimas horas en poder nombraros a todos (mi familia, amigos, bariamigos, compis, conocidos, personal sanitario...). Espero que os deis todos por aludidos, si no que mal, jajajajaja.

Eso si, permitidme una pequeña dedicatoria: Quituji, gracias por enseñarme la belleza humilde de lo pequeño, la sencillez perfecta de la naturaleza, y el incalculable valor de un abrazo sin fin.

Os dejo una foto de lo que dicen que es el espejo del alma, y creo que podréis entender a lo que me refiero con toda la parrafada que os he soltado. Entre ambas fotos, hay 5 años de diferencia, la primera de 2010, la segunda de hace dos semanas escasas. Sirva de referencia a aquéllos que me pedís comparativas. Sed felices, os quiero a todos, y muchas gracias.

Vuelos oníricos

Una noche, mientras la ciudad duerma iré a buscarte. Dejaré mi habitación, saldré por la ventana, para volar y encontrarte.

Iré por los tejados de la ciudad, de salto en salto y de vuelo en vuelo, sintiéndome libre como los pájaros entre las nubes, como los niños en el parque, como el sol en el cielo.

Cuando por fin te encuentre, estarás esperando en la ventana, el único junto a mí que no duerme, no te sorprenderás al verme, es más, sé que me esperabas.

Me volverás a tocar con tus manos calientes, me devolverás el calor después de mi largo vuelo, y será todo perfecto.

Y dará igual lo que pase después, porque lo mejor, ya ha pasado.

... Y la magia existe

Si, la magia existe, donde menos lo esperas, cuando menos lo esperas, en lo que menos esperas.

Es así, sorprendente, única, que te hace dudar de si duermes o estás despierta.

La magia siempre será, de aquellos que no cesan de buscarla, que la esperan, que la sueñan...

No hay que buscarla en grandes cosas, porque en realidad está en las cosas más pequeñas.

Y si por casualidad, no la encuentras, siempre se puede inventar, pero nunca hay que renunciar a ella.

Mientras dormía

Soy torpe para darme cuenta de algunas cosas, últimamente me comporto como una anguila escurridiza, alguien a quien no quiere que la pillen.

Intento pasar desapercibida, vivir en mi universo entre nubes blanditas, mirar boca abajo al mundo, mientras gira, gira y gira.

Será que no quiero llevarme más decepciones, que por hoy, ya ha sido más que suficiente, y vivir lejos de la tierra me tiene la mar de entretenida.

Ayer fue un cruce extraño, para variar intenté pasar inadvertida, pero está visto que no lo conseguí, y para colmo, ni cuenta me dí, o quizás no quise verlo.

El tiempo para algunas personas, parece que no pasa, y la vida te vuelve a poner en el mismo sitio, con situaciones parecidas.

Yo sé que crees que no te ví, que no sé que estás ahí, pero no es así, yo te sonreía, mientras dormía.