martes, 2 de febrero de 2016

CUANDO LA VIDA TE DA SEGUNDAS OPORTUNIDADES

Menudo título para una entrada, y una entrada, que para mi si cabe, es quizás la más importante que he escrito en todo este tiempo.

Si, hace más de un año, la vida me puso enfrente de una situación difícil, casi límite diría yo. Tuve que tomar una decisión drástica, algo que nunca pensé que haría, algo que cuando lo tuve claro y lo compartí con mis allegados, tuve que vivir reacciones de todo tipo, desde los que me apoyaron (que fueron los menos), pasando por los que se asustaron, hasta los que me llamaron loca y me auguraron el fracaso más estrepitoso.

Hoy, (más bien mañana día 4), un año después de todo aquello, no me puedo sentir más afortunada, mi vida ha cambiado tanto, que a veces ni siquiera soy capaz de reconocerme. Si, la vida me dio una segunda oportunidad, me dijo bien claro que no sería fácil, que sería muy duro, que me encontraría incomprensión, hipocresía de mucha gente, pero como buena escorpio que soy, me tiré a la piscina, y gracias al cielo, todo salió mucho mejor que bien. Sin duda he vuelto a nacer de nuevo.

Y de repente, he debido de ser muy buena, porque a la vez de este proceso, he recibido otra segunda oportunidad, una que me ha venido sola, y que aún me cuesta creer que haya pasado. Voy día a día, cada día que pasa lo siento como una prórroga, y doy gracias al cielo porque a lo tonto se lleva prorrogando más de un año. Sólo espero, que por pedir no quede, que se prorrogue hasta el infinito y más allá...

Quiero dar las gracias a todos los que me habéis apoyado, preguntado, sostenido, animado, preocupado... Vamos, los que habéis estado ahí para que no me viniese abajo, para que fuera fuerte, para que luchara, me encantaría poder daros las gracias uno por uno, pero creo que tardaría muchísimas horas en poder nombraros a todos (mi familia, amigos, bariamigos, compis, conocidos, personal sanitario...). Espero que os deis todos por aludidos, si no que mal, jajajajaja.

Eso si, permitidme una pequeña dedicatoria: Quituji, gracias por enseñarme la belleza humilde de lo pequeño, la sencillez perfecta de la naturaleza, y el incalculable valor de un abrazo sin fin.

Os dejo una foto de lo que dicen que es el espejo del alma, y creo que podréis entender a lo que me refiero con toda la parrafada que os he soltado. Entre ambas fotos, hay 5 años de diferencia, la primera de 2010, la segunda de hace dos semanas escasas. Sirva de referencia a aquéllos que me pedís comparativas. Sed felices, os quiero a todos, y muchas gracias.