martes, 26 de julio de 2011

Vuelve a ser de noche


Hoy me levanté tempranito, a las seís y media, y aún era de noche. La última vez que me levanté a esa hora, estaba recien llegada la primavera, habían cambiado la hora, y era de noche. Luego llegó la baja, y los días durmiendo a todas horas, así que olvidé esa sensación de salir a oscuras, con algunas luces encendidas, esas que con los ojos cerrados, puedo imaginar, después de tanto tiempo iluminando mi bajada a la parada de bus.

El bus, casi vacío, me recibe con el Alejandro de la Gaga, y de repente, parece que despierto de golpe, y canto la cancioncilla en mi interior, la mañana empieza con marchuqui.

Me bajo y hago transbordo, aún es de noche, pero a lo lejos se ve la sombra recortada del Veleta, sobre las primeras luces del día. Hablando de la Sierra, echo de menos a las chicas de Cetursa, que me contaban todas las mañanas como estaba de bonita la Sierra, claro, ahora es verano, y no queda casi nieve, no es igual...

Llego al Parque de las Ciencias, y me dispongo a dar el paseito hasta la ofi. Me resulta raro no encontrarme al jefe, con el que me encuentro a la altura del Mercadona.

Al llegar a la ofi, apenas hay nadie, preparo algunas cosas, porque hoy será un día complicado.

Y entre unas cosas y otras, va pasando el día, y cada vez tengo más ganas de verte, a cada segundo que pasa. Eso es lo que hay, pequeño, es lo que hay, y mientras tanto, vuelve a ser de noche.

sábado, 23 de julio de 2011

Cuando tengo miedo de todo

Cuando todo está oscuro, no es dulce
Tengo miedo de todo
Si yo me invento mi vida
Luz y sin preocupaciones
Yo las creo al azar
Las calles en los bares
Cansada, dócil
También sigue
Siento de todo, sobre todo lo frío
Esta fractura íntima
La grieta en la pared
Sé que está ahí
Siempre en mi corazón
Y a veces me hundo
Como una piedra que rueda hacia abajo
Que cae tan baja
Tan baja que pierdo todo, cuando se rompe con todo,
Tengo miedo de todo
Tengo miedo de todo, tanto miedo de todo, tanto miedo

miércoles, 23 de marzo de 2011

Somnolencia


Me levanto como otro día cualquiera, un pelín antes de las seis y media de la mañana. Me visto, y salgo pitando cuesta abajo para ir a coger el primero de los autobuses que me acercarán a mi lugar de trabajo.

Me subo, y sin quererlo, cierro varias veces los ojos. No pasa nada, es aún temprano, y aún parece que sigo dormida. Bajo del autobus, y me dirijo a la otra parada del otro autobus, justo enfrente de donde me deja el anterior.

Mientras espero su aparición, intento acurrucarme, el viento frío intenta colarse por todos sitios, pero eso no consigue mantener mis ojos abiertos durante todo el tiempo. Vaya por dios, hoy parece que he dormido peor que otros días.

Por fin llego al trabajo, voy a la maquinita del café y me saco uno con leche. Quién me ha visto y quien me ve, no me gusta nada de nada el café, me sienta mal, yo soy más de té, pero por eso mismo parece que me hace más efecto, o me hacía...

Comienza mi jornada de trabajo, hoy toca aprender cosas nuevas. Me voy con mi hojilla de notas y mi silla, toda dispuesta a aprender lo que se tercie. Empiezo a tomar mis notas y a atender lo máximo posible a mi compi, para que cuando me quede sola, no tenga ni la más mínima duda sobre lo que tengo que hacer. De repente, los ojos se me nublan, y los dedos parecen no querer escribir. Pues si que he dormido mal esta noche. Le pido un momentito a mi compi, y me voy derecha al baño, necesito echarme agua fría en la cara, porque siento que me podría dormir en cualquier momento.

Vuelvo con mi compi, menos mal que la explicación está casi terminada, y pronto puedo volver a mi mesa. Me pongo con lo que tenía pendiente hacer, y no ha pasado un rato, y me vuelvo a quedar medio traspuesta. Cojo dinero y bajo a por otro café, deseando con todas mis fuerzas que por fin me despierte.

A trancas y barrancas, voy consiguiendo que pase el día, pero sin lograr totalmente sentirme bien despierta. Es más en algunos momentos, hasta me da la sensación de que me he quedado dormida, y que hasta he soñado, pero no lo tengo demasiado claro.

Como al mediodía, no mucho, para evitar más sueño, pero da igual, el sueño me ataca en todo momento. Cuando llega el momento de irme, no me lo puedo creer.

LLego a mi casa, intento hablar con mi hermano o con algún amigo, y no puede ser posible, me quedo dormida en el sillón frente al Pc. Cuando despierto, pego un salto en la silla, miro para todos los lados, estoy despistada, y me cuesta reaccionar.

Termino acostandome pronto, porque siento que lo que me pasa no es normal y tengo que dormir más. Pero al día siguiente, la pesadilla vuelve a comenzar, y eso que me había acostado antes.

lunes, 28 de febrero de 2011

28 de Febrero, Día mundial de las enfermedades raras

Otro año más, quiero hacerme eco de este día en mi blog. A la mayoría os dará igual, pero para mí no es un día más. Será porque yo tengo una de esas enfermedades raras, y viví desde pequeña mi particular via crucis, hasta que consiguieron saber que tenía, eso si, por los pelos, un poco más y no lo cuento.

Os dejo las páginas de siempre, y un recordatorio de lo que puse el año pasado aquí.

http://antarita13.blogspot.com/2010/02/28-de-febrero-dia-mundial-de-las.html

http://www.elmundo.es/elmundosalud/2011/02/28/noticias/1298891182.html

Federación española de enfermedades raras: http://web.enfermedades-raras.org/

Portal de Salud Pública de la UE: http://ec.europa.eu/health-eu/health_problems/rare_diseases/index_es.htm

jueves, 24 de febrero de 2011

Para que no te olvides de mí

Uniría las estrellas formando constelaciones diferentes, más bonitas y de formas más hermosas de las que existen ahora.

Dibujaría por el cielo, usando mil y un colores, para alegrar esta vida, que tantos y tantos sinsabores nos deja.

Cantaría aquellas canciones que tanto te gustaba oirme cantar, que aún parecen retumbar en mi cabeza.

Te volvería a abrazar, tan fuerte para que nunca te dieran ganas de irte más.

Es todo una tontería, porque aunque sé que te has ido, y que no volverás, vivirás en cada paso que aún me quede por dar en esta vida.

Aunque ya sé que lo sabes, te quiero.

sábado, 19 de febrero de 2011

Je comprends rien



Pour quoi nous ne sommes pas capable de couper des situations désagréables?

Pour quoi tu as envie d'être avec moi et vingt jours après tu as changé d'avis sans une explication crédible?

Pour quoi on ne peut pas être sincères?

Pour quoi tous les sentiments sont aussi compliqués de les exprimer?

Pour quoi c'est plus facile dire des mensonges?

Pour quoi tu me mens?

Dis-moi, pour quoi?

jueves, 10 de febrero de 2011

No me dejes...

No me dejes dormir esta noche, esta noche no, que siento que el amanecer me traerá miles de colores que aún no conozco, para poder dibujar mis días de formas inimaginables.

No me dejes de pensar, porque aunque no lo creas, eso lo siento yo, y me anima a seguir día tras día.

No me dejes de acariciar el pelo, porque no sé cómo explicar cada una de las sensaciones que me provoca, así como intentar parar cada uno de los escalofríos que recorren mi espalda.

No me dejes hablar, porque estar a tu lado sin hablar, sólo sentir el silencio junto a tí, el olor de tu cuerpo, el sonido de tu compañía, las caricias de tu mirada...

sábado, 1 de enero de 2011

Jaque al Rey


La Reina Negra estaba cansada de esperar una jugada maestra. Allí, quieta, sin moverse, custodiada por el Rey Negro que parecía estar pendiente de cualquier otra cosa que de ella, y un Alfil más bien anodino, pensó que sería un buen momento para demostrarles a todos, y sobre todo, a ella misma, que era capar de montar toda una revolución ella sola, sin necesidad de nadie.

Con paso firme, salió de la última línea, para comerse un pobre Peón blanco, que circunstancialmente pasaba por ahí, no sin antes echarle en cara a la Reina, que no podría nunca con el Rey Blanco.

¿Cómo no va a poder la Reina Negra con el Rey Blanco?, pensó orgullosamente la Reina. Así que sin dudarlo fue en su busca, sabiendo que las cosas no las tendría nada fáciles.

Poco rato después, una Torre Blanca se interpuso en el camino de la Reina Negra. La Torre Blanca quiso deternerla, y advertirla: "El Rey Blanco, es un hueso duro de roer, te costará dar con él, además de que nosotras las dos Torres y su Reina, no te dejaremos así como así". La Reina Negra se echó a reír, y cuando se despistó la Torre Blanca, con un sólo pestañeo la hizo desaparecer.

La Reina Negra, cada vez estaba más fuerte, y a la vez, alucinaba con todo lo que iba haciendo. No es nada fácil atreverse a conquistar todo un reino, y más a la sombra durante tantos años del Rey Negro, que había conseguido casi aniquilar sus más profundos instintos, incluido el de supervivencia.

Cuando parecía que llegaba a los dominios del Rey Blanco, vió como uno de los Caballos Negros, raptaba a la Reina Blanca. ¡Menudo favor le acababa de hacer uno de sus Cabelleros! El Rey Blanco, se quedaba totalmente sólo, y esa circunstancia había que aprovecharla.

Así que la Reina Negra, orgullosa, sin miedo, y con una seguridad en sí misma, que nunca antes había sentido se presentó ante el Rey Blanco, que nunca pensó, que se la encontraría de la forma en que ella se había presentado.

La Reina Negra sonrió efusivamente, y desafió, cómo sólo ella sabe, al Rey Blanco:

¡¡¡¡JAQUE AL REY!!!!